sábado, 29 de abril de 2017

QUÉ PROFUNDA Y NEGRA






Qué profunda y negra 

Qué profunda e insalvable la zanja que escavaron
los errores
qué largas y negras las vigilias de las noches
naufragadas
ahogadas las ilusiones en un mar insaciable
aguas fúnebres devoradoras de sueños
qué estériles los labios sin besos
las bocas sin hambre y huecas de palabras
qué venenoso el silencio que separa
los ojos sin ganas de ver
qué fríos los brazos que abrazan solo la nada
el espacio que dejaron otros brazos
y la piel de caricias ausente
qué vacías las manos que no tienen tierras que labrar
aperos de amor abandonados
palomas muertas cansadas de un vuelo inútil
qué tácitos los te quiero amordazados
subyugados al silente espacio del pensamiento
qué larga y negra la zanja que escavaron
los errores
qué infinitas las vigilias de las noches



viernes, 28 de abril de 2017

DE REGRESO





 Al cruzar el puente que separa la villa del resto de la península, decide  encaminar sus pasos por la zona de la albina para evitar el camino real  donde es habitual encontrarse con vecinos que, al igual que ella están  sufriendo las penalidades del hambre. Los alimentos escasean pero  ella, que ha adquirido una gran fama como cocinera, vuelve bien abastecida, la mayoría de veces de sobrantes de los platos que ella prepara, acordado así como parte de su retribución al contratar sus servicios. Los conocidos con los que se cruza  saben que esta mujer pequeña de cuerpo y de genio alegre, vuelve siempre con la esportilla llena de alimentos, por lo que ella  procura no atravesar el centro, más que nada para no suscitar envidias.
Juana hace el camino andando, pocas veces ha tenido la ventura de ahorrarse la caminata al ser recogida por algún carruaje que vaya en la misma dirección y se ofrezca a acomodarla en la parte trasera. A ella le gusta ver nacer el día y notar los primeros rayos de sol sobre su rostro, mirando cómo resplandecen en el asperjado de las plantas. Le complace caminar disfrutando el sonido de las aves de las marismas y sintiendo el olor de las aguas salineras. Viste siempre con batas de color oscuro que cubre en la parte delantera con un delantal bien escamondado, y nunca olvida un par de alpargatas que usa para trabajar, envueltas en un trozo de papel y metidas en una talega que cuelga de su esportilla.  A la vuelta de la jornada, desde bastante distancia,  columbra las torres de la iglesia Mayor y recuerda que nada más entrar en la callejuela donde se encuentra su casa, sus hijos saldrán a su encuentro saltando como cabritillos y rebuscando en los bolsillos del delantal donde siempre encuentran alguna galleta o unas onzas de chocolate, pequeñas delicias en tiempos de estómagos  famélicos. 
Juana sale por la mañana aún sin amanecer para recorrer los kilómetros que la separan de los cortijos. Tras una larga jornada vuelve a recorrer los mismos caminos llegando casi al atardecer. Su caminar apresurado por la premura de llegar a su hogar le provoca una respiración jadeante y cuando se detiene en el puesto de consumo situado a mitad del puente recobra el resuello mientras responde cansinamente a las preguntas de los carabineros. Pasado el trance siempre temido, continúa su camino con la satisfacción del trabajo cumplido y la alegría de llevar a  su casa lo que en la mayoría de las casas isleñas no entra desde hace mucho tiempo.


A mi bisabuela, a la que solo he conocido por los recuerdos de sus descendientes.



domingo, 23 de abril de 2017

TENGO





TENGO

Tengo un cajón de poemas
Tengo un montón de recuerdos
Tengo un cuaderno de historias
Tengo millones de besos
Tengo una caja de olvidos
Tengo una almohada de sueños
Tengo incontables abrazos
Tengo un mundo de deseos
Tengo heridas suturadas
Tengo un costal de tropiezos
Tengo un sinfín de caricias
Tengo una arqueta de versos
Tengo miedos superados
Tengo temores viejos
Tengo daños olvidados
Tengo poemas nuevos



OTRA DESPEDIDA






Otra despedida, y esta vez

ya no encuentro palabras para retenerte

me he estado aferrando a un resquicio de esperanza

he quemado las últimas naves en este puerto nuestro

del que ni siquiera hemos partido



Otra despedida, y se impone

la rabia de los sueños secuestrados

ya no me quedan voces para llamarte 

mis ojos palparán el vacío de tu ausencia

mis manos llorarán las caricias que no lograron


Otra despedida, y se vuelven

a quejar los versos que no entienden de tiempos ni voluntades

vomitaré lamentos que no puedo digerir 

verteré en mi canto los gemidos que debieron ser de gozo

y moriré en cada suspiro 



Otra despedida, ya

sin voces para implorar

alejada de ilusiones, viendo los sueños encarcelados bajo siete llaves

sin fuerzas para rogarte, sin apenas aire para llamarte

beberé en los ríos del olvido para no recordar tu nombre



Otra despedida, aunque

el amor se nos desborde por las miradas que evitamos

aunque los besos nos abandonen buscando ansiosos

los labios que los conjuran sin palabras

solo con el recuerdo de un puñado de momentos


Otra despedida

triste, agotadora, ya demasiado repetida

nunca deseada



miércoles, 19 de abril de 2017

ESTE JUEVES: UN RELATO CON FECHA




Esther lleva meses sin salir de una situación que la embarga, en su calendario ha tachado ya demasiados días, ha visto demasiados amaneceres y temblado demasiados inviernos. Ha recorrido las mismas calles cientos de veces, mirado el mismo horizonte y sentido la misma vida desde que llegó al mundo. Tiene gastadas las losas de su consciencia y los senderos de su alma presentan signos del paso del tiempo, sobre todo se siente maltrecha por los momentos más tormentosos que ha tenido que vivir.  Su futuro ya se vislumbra finito, tiene fecha de caducidad a la vista, ya no es aquel  tiempo lejano que parecía inagotable. La vida está pasando a una velocidad vertiginosa. A veces recuerda la época en la que se planteaba qué sería cuando cumpliera los treinta años, entonces era algo tan remoto que difícilmente podía imaginar. Y ahora…ha pasado tanto tiempo de aquello.
Sus días, aunque los suele llenar de actividades, son monótonos, con una rutina casi enfermiza, sorbiendo la vida a poquitos para que dure más, un día tras otro, sin salirse del camino para sentirse segura. 

Sobre su mesa de trabajo siempre hay un almanaque en el que va marcando los días, solo los que debe recordar por algún motivo. Hace un par de años, que viene rodeando varias fechas, lo hace ilusionada, ha ocurrido algo que le ha hecho renacer, de nuevo es la mujer que creyó perdida, emergió de su interior con ganas de vivir intensamente. Pero el destino no permite que sean cambiados sus designios y cada vez que se acerca una de las fechas que tanto ansía, ocurre algo que impide que ese día pase a ser inolvidable y quede rodeado por la tinta como un pudo ser y no fue, como un viejo retrato enmarcado al que se le ha ido borrando la imagen y queda como una bagatela a la que nadie da valor, un trasto antiguo que nadie sabe qué significado tuvo y acabará en el más ingrato de los olvidos. Y ella misma, al mirar las fechas marcadas pensará qué fue de aquella ilusión que un día la sacó de su letargo, qué pasó con la mujer que despertó en un sueño y creyó que podría vivirlo realmente. 


domingo, 16 de abril de 2017

CUANDO YA NO TE SIENTA





Cuando ya no te sienta       (Soneto con estrambote)

Cuando no te sienta a mi alma aferrado
Cuando ya me libere de tu esencia
Cuando ya no me perturbe tu ausencia
Cuando mi ser hayas desocupado

Cuando olvide este empeño no logrado
Cuando ya recobrada mi conciencia
Acepte no pender de tu presencia
Y mi cuerpo se halle deshabitado

Cuando cese el dolor de este pasado
Volveré mi mirada hacia el camino
Y dejaré mi sueño abandonado

Con tristeza obedezco a mi destino
Más no me arrepiento de haber amado
Reanudaré la senda de mi sino

Fue quizá, este sueño un desatino
Ilusiones con la fuerza de los besos avivadas
Anhelo de reencuentros, noches soñadas



sábado, 15 de abril de 2017

POEMA A UN SUEÑO





A un sueño inmolado


A un sueño gastado de tanto soñarlo

a un sueño que quiso salir de su universo

y se perdió en la nada

a un sueño inmolado

postergado en aras de la verdad

A un sueño que quiso salir a tu encuentro

para hacerse realidad y se diluyó en el aire


A las largas noches que lo acunaron

a las horas de desvelo tras las huellas 

de sus contornos confusos

al sueño que fue solo eso, un sueño desvanecido

un deseo naufragado en un piélago nocturno

un delirio perdido en calles de un laberinto

sin hilo, 

un espejismo ilusorio 

una ensoñación sin otra salida que despertar




INVOCACIÓN






Invocación 

Si hoy fuese mi  último día
No me importaría nada
No me apenaría
Dejaría la vida como llegué a ella
Sin darme cuenta

Puedes venir a buscarme
Me iré contigo
Serás bien recibida
Dejaré la vida como llegué a ella
Sin rencores, desnuda, decidida

Atrás quedarán amores, desengaños y mentiras
Atrás quedarán los sueños
Las promesas incumplidas
Dejaré la vida como llegué a ella
De recuerdos desprovista

¡Ven a buscarme, muerte!
No temo perder la vida
No siento dejar el mundo
Dejaré la vida como llegué a ella
Los ojos cerrados,  las manos vacías.


miércoles, 12 de abril de 2017

HILVANANDO VERSOS






Hilvanando versos

Estoy bordando mis sábanas
con hilos de amor arrancados del recuerdo
Estoy remendando mi alma
con retales de tus versos, aquellos que me escribiste
cuando eras tú antes del miedo
Estoy cosiendo mis deseos en un lienzo
hecho con trozos de nubes, nimbos cargados de sueños
Estoy hilvanando en mi piel
con hebras de pesadumbre, los anales de tus besos

Voy a tejer unas alas de lujuria,
plumaje de amor inmenso, unas alas de esperanza
Voy a volar a tu encuentro
voy a quemarme en tus ojos, y renacer en tu cuerpo



lunes, 10 de abril de 2017

DE MI VENTANA A LA TUYA





De mi ventana a la tuya

De mi ventana a la tuya
la exhalación de un suspiro
el instante de un latido

Y estamos tan lejos

De mis manos a tus manos
solo el espacio de un verso
una caricia anhelada

Y estamos tan lejos

De mis labios a tu boca
la distancia de un te quiero
la urgente necesidad de un beso

Y estamos tan lejos

De mi ventana a la tuya
Solo quedan sueños

¡Estamos tan lejos!





domingo, 9 de abril de 2017

A TI, PADRE, DESDE MI DOLOR






A ti,  padre, desde mi dolor

Aún no puedo mirarte sin llorar
Es  tan inmenso el dolor que siento
Te fuiste sin avisarme, de repente
¿Por qué no me esperaste?

Aún no puedo mirarte sin morir contigo
Nos robaron el tiempo de despedirnos
Te fuiste sin abrazarme, de repente
Sin regalarme una última mirada, y mis dos besos

Aún no puedo mirar tu imagen, papá
Sin que agujas punzantes mis ojos hieran
Y mi alma se desborde plañidera
Y un pellizco las entrañas me retuerzan

Aún no puedo mirar mis manos
Sin verlas huérfanas de las tuyas, papá
No puedo entender esta inflexible muerte
Nunca,  esta ausencia lacerante

Aún es tan grande la pesadumbre que siento
Es tan desgarradora la pena
Es tan larga la condena, tan insoportable  el duelo
Y ni el consuelo de mirarte tengo



jueves, 6 de abril de 2017

TENGO QUE APRENDER A VIVIR, SIN TI





Tengo que aprender a vivir,  sin ti

Errante pensamiento mío
Que vaga por las calles de tu recuerdo
Aún no he logrado arrancarme de la piel
Las huellas que tus deseos me fueron dibujando
Cuelgan de mis labios tus últimos besos
Hirientes y a la vez confortadores
Vestigios de una pasión condenada 
Sentenciada a ser olvido

Tengo que aprender a mirar sin ti
Un horizonte que no es el nuestro
Un camino paralelo pero distante

Tengo que ensordecer mis oídos
Al eco de tus palabras,
Aquel canto de versos de tus primeras miradas

Tengo que desandar
Las letras de tus poemas
Para empezar a vivir, sin ti

Tengo que atarme las manos
Para que desaprendan los caminos de tu cuerpo
Para que olviden tu tacto enardecido

Tengo que lacrar todos mis sentidos
Y morir para nacer de nuevo
Volver al tiempo de no saberte

Tengo que liberarme de tu adicción
Reinventarme
Para aprender a vivir, sin ti





miércoles, 5 de abril de 2017

LA ÚLTIMA NOCHE






LA ÚLTIMA NOCHE

Cuando llegue la noche la estaré esperando
La oscuridad será mi aliada
Eclipsando un adiós postergado, impuesto
Saldré despacio para no enturbiar tu descanso
Ya nada me ata a esta tierra de aridez y desesperanza

Cuando llegue la noche
Veré las grietas por donde huyeron mis sueños
Escarbaré los fangos que los devoraron
Vagaré por donde un día pasee mis ilusiones tardías
Allí donde los deseos quedaron ocultos

Cuando llegue la noche
Estaré dispuesta a partir
Ya no quiero creer en nada
Ya no puedo emerger de nuevo
De estos lodos que me absorben
Las palabras se deshicieron en aguaceros de llantos
Y reinaron los silencios

Cuando llegue la noche la estaré esperando
Sin miedo
Sin nada que llevarme salvo unos pocos recuerdos
Y mil sueños incumplidos

Cuando llegue la noche última
Saldré de la negrura que me ciega
Y que me ahoga
Cuando llegue la última noche
Saldré de tu ausencia